La comarca que baña el Mandeo es considerada desde el siglo XVII como una de las más fértiles de Galicia. Aunque la pesca, sobre todo la de la sardina en la ría y la de salmón y reo en los ríos principales, o los alfolíes de sal en la desemocadura del Mandeo, tenían cierta importancia como actividades económicas complementarias, lo cierto es que la agricultura y la ganadería eran la principal fuente de riqueza. Hoy en día, ambos, tnato lahuerta como el vino, cozan de un merecido reconocimiento dentro de los círculos gastronómicos. Dentro de la cuenca del Mandeo, se reconocen dos zonas según su vocación productiva. En la parte alta, en el interior, la producción es sobre todo ganadera Destacan entonces las excelentes carnes de ternera, de cerdo y de cordero; pero también los suaves quesos elaborados a partir de su cabaña ganadera, principalemente de leche de vaca.
La cuenca baja del Mandeo se corresponde con la conocida horta mariña, en la calidad es la idendidad común de todos sus productos. Las particularidades del relieve en esta zon, unidas a la fertilidad del suelo y a un microclima especial, hacen de de su huerta una fuente de referencia en el abastecimiento necesario para la elaboración de los mejores platos de la cocina gallega.
Aires mediterráneos en el Mandeo...
Las particulares condiciones geográficas de la cuenca baja del Mandeo generan un microclima caracterizado por la baja oscilación térmica anual - sólo 8,ªC- y la moderación de las precipitaciones. Esto hace que el clima adquiera un cierto matiz que recuerda el mediterráneo, favoreciendo cultivos como el de la vid en las laderas.
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